lunes, 23 de septiembre de 2013

CASTILLO DE ARENA


Estoy encarcelada en la torre más alta
de tu castillo de arena.
Custodiada por gigantes de hielo
cerraste todas las puertas.

Detrás de la fría noche...

El sol espera el ocaso,
Y La luna, con su inerte sombra,
me ofrece sus lágrimas rotas.

los fantasmas arrastran las cadenas del pasado

y se despojan de sus ropas,
cubriendo mis lágrimas con harapos blancos...
Tejiendo en mi alma una tela de araña.

Postergada sobre un lecho de paja,

esperando a que el sol abra las puertas,
languidece mi cuerpo...
Por entre las grietas de las paredes muertas.